Con más de cuatro décadas de historia, Joluvi se ha consolidado como un referente en el diseño y distribución de prendas deportivas. Desde su sede en Asturias, la compañía exporta hoy a más de 15 países, demostrando que la innovación, la calidad y la adaptación a cada mercado son claves para crecer en el exterior.
Nacida en los años 70 como un pequeño proyecto familiar, Joluvi evolucionó de distribuidor de marcas internacionales a creador de sus propias enseñas: Joluvi, Mosconi y Jack London. Hoy, estas marcas son sinónimo de tecnología, diseño y funcionalidad, con líneas que abarcan desde el equipamiento de ski y montaña, hasta el running, fitness y la natación de alta competición.
Su proceso de internacionalización ha estado marcado por una estrategia clara: diseño propio en Asturias, producción global y adaptación a cada mercado. Así, mientras en Malta ajustan tallajes y materiales a las condiciones locales, en Italia optimizan sus prendas para el uso en zonas alpinas. Una flexibilidad que les ha permitido hacerse un hueco en un sector dominado por gigantes como Nike o Adidas.
Actualmente, Joluvi tiene presencia consolidada en Europa —Italia, Alemania, Portugal, Reino Unido o Grecia— y mantiene proyectos en expansión hacia Latinoamérica, con mercados como Uruguay, Argentina y México en su punto de mira. Además, su participación en ferias internacionales como ISPO Múnich y el respaldo de entidades como ASTUREX o ICEX han sido determinantes en su trayectoria.
Joluvi es un ejemplo de cómo las empresas asturianas pueden crecer y consolidarse en el exterior a través de la innovación y la internacionalización.
Descubre la historia completa en el caso de estudio que el Grupo de Investigación I&DE de la Universidad de Oviedo, en colaboración con Asturex, ha elaborado sobre la empresa:
